En una sociedad donde el envejecimiento es una evidencia que nos hace enfrentarnos a situaciones de mayor vulnerabilidad a medida que pasan los años, urge la revisión de los diseños universales de las ciudades, de los componentes, etcétera. La coyuntura personal del arquitecto Ron Mace (1941/1998) como usuario de silla de ruedas, permitió una perspectiva más elocuente de la importancia del diseño de productos y entornos accesibles: los siete principios del Diseño Universal.
1.-Eludir estigmas: igualdad de uso independiente de sus capacidades y habilidades.
2.- Diverso: Flexibilidad: diseños adaptados a la diversidad (personas diestras, de gran altura, etc.)
3.- Intuitivo: uso Simple y Funcional, sea cual sea la pericia y/o experiencia
4.- Información comprensible, información suficiente y por los canales que
5.- Seguridad, minimizar riesgos, errores, peligros, etc.
6.- Comodidad: con la menor fatiga posible, con el mínimo esfuerzo físico, evitando las acciones repetitivas, etc.
7.- Proximidad: disponer de espacios de fácil manipulación, de adecuado tamaño,
Una perspectiva que amplía el campo conceptual de la simple usabilidad. (Steinfeld y Maisel, 2012), para satisfacer una serie de objetivos inferidos de los siete principios, pero destacando la dignidad y el respeto necesario para tratar a todos por igual (Objetivo 6) y de manera personalizada (Objetivo 7), junto a los valores cultuales (Objetivo 8).
Para facilitar la accesibilidad desde el plano actitudinal y el cumplimiento de centros acreditados, se sugieren buenas prácticas como el código de colores para diferenciar entre accesibilidad sensorial y cognitiva, comunicación y movilidad, pautas normativas, listados de comprobación rápida, etcétera.
Agenda 2030. ODS 11. Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles
Meta 11.b. De aquí a 2020, aumentar considerablemente el número de ciudades y asentamientos humanos que adoptan e implementan políticas y planes integrados para promover la inclusión, el uso eficiente de los recursos, la mitigación del cambio climático y la adaptación a él y la resiliencia ante los desastres, y desarrollar y poner en práctica, en consonancia con el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030, la gestión integral de los riesgos de desastre a todos los niveles.